Videocámaras prosumer para RRSS
Por VÓRTICE
18-03-2021
Todo eso que esperabas que fuera mejor que lo que finalmente te has encontrado
En esta entrada de nuestro blog vamos a comparar, sin entrar en excesivos tecnicismos y de forma eminentemente práctica, la experiencia en el uso de una videocámara compacta, destinada al usuario "prosumer", con los resultados obtenidas empleando cámaras profesionales.
Es algo sobre lo que ciertamente veníamos queriendo escribir desde hace tiempo atrás y que finalmente, Macrobioteca, formadores en técnicas de cocina macrobioticas, nos ha puesto en bandeja de la mano de un proyecto personal de vídeos para RRSS.
Sony ZV1, como paradigma de cámara compacta
La Sony ZV1 es una cámara compacta avanzada que pesa apenas 300 gramos y tiene el tamaño de una caja de gominolas, su óptica zoom es muy luminosa y posee un sensor de una pulgada que le permite tomar fotografías de 20,1MB.
Este tipo de cámaras son pequeñas, tienen estabilizador integrado, objetivo luminoso, enfoque inteligente y ultrarrápido, pero es que además este modelo tiene pantalla totalmente abatible, micrófono direccional de tres cápsulas, lámpara de aviso de grabación, filtro ND, entrada de mini-jack, 125–12.800 de ISO para vídeo, y por supuesto es capaz de grabar en 4K a 30fps.
Estabilizador de Movimiento
Los equipos profesionales se definen a menudo no solo por los formatos de grabación que permiten, sino por la ergonomía de su diseño, la facilidad de configuración y uso en condiciones estresantes o adversas.
Así, a nivel profesional la estabilización de movimientos libres de cámara la conseguimos por medios electro-mecánicos, como grúas, sliders, travellings o, más recientemente, gracias al empleo de un gimball.
Este tipo de aparataje, contrarresta los movimientos bruscos que la cámara recibe, realizando micro-correcciones en tiempo real a través de sus brazos articulados, controlados por servomotores.
De esta forma conseguimos movimientos suaves y controlados a la máxima resolución que requiera el proyecto.
En el caso de la ZV1, aunque su ergonomía no deja de ser la de “una caja”, su poco peso la hace cómoda para sostenerla en las manos y realizar movimientos libres, activando eso sí el modo de estabilización de imagen para que la grabación no resulte demasiado “agitada”.
Como en el caso de los smarphones, la estabilización por software de las cámaras "prosumer" hace maravillas pero no milagros. La imagen registrada por el sensor es escalada y deformada para conseguir la sensación de fluidez, y se generan artefactos de “trepidación” en ciertos tipos de saltos entre fotogramas, impidiendo conseguir transiciones suaves.
En esos casos la merma en la calidad de imagen resulta apreciable.
Enfoque Automático
Otro aspecto muy destacado de los modelos de cámaras compactas "prosumer" es el enfoque automático.
En el caso de la ZV1, puede enfocar desde 30cm a infinito en ¡0,03 segundos! Sin duda, poder operar la cámara sin tener que preocuparnos por el enfoque resulta muy cómoda para los creadores del tipo “hombre/mujer orquesta”, pero lo cierto es que el sistema de autoenfoque inteligente se encontrará en no pocas ocasiones con dilemas sobre el punto de interés, produciendo rápidos vaivenes en el foco, y aunque bien es cierto que la cámara dispone de una opción de enfoque manual por software, resulta totalmente inoperativa para grabar con soltura.
A nivel profesional la falta de control en el enfoque es inadmisible. En nuestras producciones empleamos seguimiento de foco manual, ya que junto a su atractiva estética es una herramienta narrativa más, al ayudarnos a dirigir el punto de atención del espectador.
Lente Fija
La lente zoom que monta la Sony ZV1, es una 24-70mm, lo que proporciona un ángulo de visión muy versátil además de luminoso, con aperturas máximas de F1,8 (G) - 2,8 (T).
Para conseguir los atractivos efectos de escasa profundidad de campo, la cámara mantiene en modo automático aperturas máximas y juega combinándolas con la velocidad de obturación y la ISO.
Esta combinación automática de parámetros puede generar ruido en las imágenes y efectos de filaje en los movimientos rápidos de la cámara, de los personajes y objetos.
Por otra parte el gran angular de 24mm produce una cierta deformación de efecto barril, claramente apreciable en los motivos colocados cerca de la cámara.
A nivel profesional empleamos por contra lentes intercambiables, tanto "prime" como "zoom", pudiendo así elegir aquellas con la luminosidad adecuada para cada escena, de acuerdo a las especificaciones de la dirección de fotografía.
La calidad en la construcción de las lentes y su tamaño es siempre mucho mayor que en cualquier cámara compacta, como también es mayor el tamaño del sensor en las cámaras profesionales, lo que proporciona superior definición sin aberraciones cromáticas, textura de las imágenes más orgánica, minimización de la distorsión en la perspectiva, escasa profundidad de campo, y posibilitan añadir filtros para conseguir determinados efectos.
Calidad de Grabación
La calidad de grabación de imagen de la Sony ZV1 es muy notable, pese a que a nuestro juicio tiende a la sobreexposición, satura ligeramente y las imágenes adolecen de una textura poco natural.
Es capaz de grabar en formatos logarítmicos con resolución 4K y hasta 30fps, pero el problema con las cámaras compactas es que lo hacen en archivos comprimidos aptos para difusión, y no tanto para ser post-producidos, con lo que al editar y masterizar degradaremos ya de manera apreciable el metraje ya de por si (excesivamente) comprimido por la cámara.
En fuerte contraste con lo expuesto, las cámaras profesionales nos permiten grabar con resoluciones desde 4K en adelante, y a un ratio de fotogramas por segundo de 25, 60, 120, etc, para alcanzar los objetivos de calidad requeridos para cada proyecto.
Pueden grabar en formatos profesionales con escasa compresión y también en archivos RAW, que contienen la información completa registrada por el sensor, lo que posibilita el control total sobre la imagen en los postprocesos y masterizado, sin merma de calidad.
La prueba
Para que el resultado final del vídeo fuese lo más similar posible al resto de las producciones VÓRTICE y poder así tener el máximo control sobre la Sony ZV1, la dejamos configurada en el modo totalmente manual. El hacerlo así puso en evidencia que, aunque las opciones en los menús son muy completas, la navegación por sus decenas de pantallas resulta farragosa para grabar rápido.
La batería interna nos permitió tener la cámara encendida durante 45 minutos, a lo largo de los cuales pudimos apreciar su creciente calentamiento, eso sí sin fallos en el manejo o la grabación.
Cabe hacer hincapié aquí en que, profesionalmente, se suelen emplear baterías externas de gran rendimiento, que permiten operar la cámara sin apagarla durante horas. Además, las cámaras profesionales tienen ventilación propia, son robustas, ergonómicas y estancas para trabajar durante largos periodos de tiempo.
Conclusiones
No comentaremos aquí las virtudes de la cámara compacta Sony ZV1 en el registro de audio, ya que en nuestra forma de trabajar el audio se registra siempre mediante dispositivos dedicados, y tampoco vamos a analizar su capacidad como cámara de fotos.
El reto de grabar con una cámara compacta y conseguir un aspecto profesional ha sido divertido, pero no tan ágil como pensábamos en un primer momento.
Este tipo de cámaras compactas nos parecen estupendas para Youtubers o similares, que tengan que hacerse cargo ellos mismos de toda la producción. La relación entre sus características y el precio es excelente, y aunque su manejo en modo manual es complejo, resulta muy sencillo en modo automático, donde se conseguirán resultados estándar.
La calidad de imagen es correcta, aunque lógicamente no alcanza las prestaciones y calidades de las cámaras y aparatajes profesionales.
En todo caso, más allá de la tecnología, a nuestro entender sigue primando el criterio y la creatividad a la hora de grabar cada plano, disponiéndolas de forma ordenada para crear la narración de una historia de forma personal, emocionante y efectiva.