Tiende tu mano y enrédate
Cáritas
Los requisitos
Para apoyar una intensa campaña de concienciación respecto a la creciente problemática de exclusión y pobreza, se nos solicitó por parte de los responsables de Cáritas, la realización de un vídeo orientado a redes sociales que llevase a una profunda reflexión.
En palabras de los responsables de comunicación del cliente, la narración debía articularse en torno a: "volver a sentir que las personas nos necesitamos unas a otras y que tenemos una responsabilidad compartida: no permitir que nadie quede atrás."
Nuestro enfoque
Desde un primer momento quisimos alejarnos del cliché que, en nuestro país, asociamos con exclusión. Optamos así por darle el protagonismo a una persona joven y sana.
Es esta la de la juventud una franja de población especialmente estigmatizada en nuestros días, y que sin comerlo ni veverlo, va a sufrir muy severamente las consecuencias de las malas decisiones tomadas por las generaciones anteriores. Un triste presente (40% de paro, alta precariedad laboral, imposibilidad de acceso a la vivienda, ...) y peor futuro a la vista que, en el caso de personas inmigrantes, resulta si cabe aún más desesperanzador.
Dicho esto, juventud es sinónimo de vida, de osadía para llamar a todas las puertas sin deparar en el esfuerzo, de superar el cansancio de las decepciones con una energía que, en esas etapas de la vida, fluye aún a borbotones.
Es este el enfoque sobre el que, de uno u otro modo, queríamos articular la narración. Mostrar a una persona que pone todo de su parte, pero que naturalmente aún así precisa de ese último empujón, la ayuda de esa mano tendida que le brinde una sociedad que realmente merezca ese nombre.
Así, planteamos la grabación en entorno a una persona que ha tenido que abandonar su país y a sus seres queridos para buscar un futuro mejor, al que acompañamos en su deambular sin descanso por las calles de una gran ciudad, llamando aquí y allá a innumerables puertas, sin recibir respuesta alguna, lo que poco a poco le hace ir deslizándose en la desesperación, que acabará por llevarlo a la postración en la que lo encontramos al principio de la narración.
El resultado
Registrado en multiples localizaciones de la ciudad de Zaragoza y sus alrededores, el vídeo busca un enfoque honesto, que ponga cara a una problemática dura, aunque sin caer en el patetismo que tantas veces se logra a costa de la dignidad de la persona.
Empleando un formato de cinematografía digital, hemos buscado en esta pieza audiovisual poner al espectador en la piel del protagonista, hasta el punto de recurrir al plano subjetivo; sus esperanzas y ¿por qué no? su estado de ánimo ante la actual situación de crisis social.
Con todo ello en mente, creemos que la pieza audiovisual creada nos sitúa frente al espejo de nuestra necesaria vinculación con los demás porque, solos, somos vulnerables y limitados. Cumple así con las especificaciones del cliente, y de hecho nos consta que ha sido muy bien acogida en distintas acciones de sensibilización de jóvenes y niños, con exhibiciones en colegios, institutos y otras colectividades.